sábado, agosto 05, 2006

El Gobierno canario pide responsabilidad a la comunidad internacional con la inmigración

El director general de Relaciones con Africa del Gobierno de Canarias, Luis Guillermo Padilla, pidió hoy "responsabilidad" a la comunidad internacional y a los países emisores de emigrantes para atajar el "drama humanitario" de los cayucos, porque "diariamente está muriendo gente" en las travesías.
"Tenemos que tener muy claro que lo que está pasando es que está muriendo gente, mucha gente. Ante este drama humanitario, no vale mirar para otro lado", afirmó Padilla, durante su participación en el curso de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo "Una nueva agenda de democracia y buen gobierno para Africa Subsahariana".
Este representante del Gobierno insular reconoció que Canarias "no puede soportar por mucho más tiempo" la presión de la llegada diaria de inmigrantes a sus costas, pero también subrayó que el "verdadero drama" no es el de las personas que llegan, sino "el de los que no llegan", el de aquellos que no logran superar "una travesía que lo más normal es que no te lleve a ninguna parte".
"Si no se arbitran las medidas para poder gestionar este fenómeno, nos va a desbordar y no sólo en Canarias. Porque la gente no busca llegar a Canarias, Canarias es un lugar de tránsito", dijo.
También defendió que, aunque su comunidad y el Estado estén haciendo "grandes esfuerzos" para atender a los subsaharianos que llegan a las islas o son rescatados en el mar, "éste no es un tema bilateral", sino que requiere "una reacción más rápida de la UE", "responsabilidad" por parte de los países emisores y que "empiecen de una vez las operaciones que están previstas hace más de un mes".
"Mi pasión es la vela y no entiendo cómo pueden llegar en cayucos haciendo frente a unos mares y a unos vientos relativamente fuertes, después de seis, siete, ocho días de navegación. Sabemos los que llegan y cómo llegan, pero no cuántos no llegan. Esa es la realidad de la situación", enfatizó el director general canario.
En opinión de Padilla, la respuesta a este fenómeno debe combinar medidas en varios ámbitos, como el control de fronteras, la cooperación al desarrollo, la acción por parte de los gobiernos locales y la agilización de los cauces regulares de migración.
En este mismo aspecto incidió el responsable del Fondo Catalán de Cooperación (un instrumento que canaliza las ayudas al desarrollo de numerosos ayuntamientos de Cataluña), Aliou Diao Baldé, quien pidió que se facilite la inmigración regular.
Baldé argumentó que lo que está ocurriendo con los inmigrantes que tratan de entrar en España en cayucos o pateras "también es fruto de la política de entrada", porque es "excesivamente restrictiva" y hace muy difícil lograr un visado a quien quiere emigrar a Europa.
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1 comentario:

Diario de la Inmigracion dijo...

Es indudable que para frenar la inmigración hay que potenciar la industria, la agricultura, etc, en los países de origen.
Controlar las fronteras, si, para que no haya más muertos. Pero ayudar a los nativos a saber utilizar sus riquezas, que las hay, en lugar que solo sirvan para enriquecimientos indebidos...