domingo, agosto 07, 2011

Centenares de «sin papeles» aguardan para llegar por mar a Ceuta y Melilla

ESTEBAN VILLAREJO / LE PETIT BOIS (MARRUECOS)
En el monte marroquí «Le Petit Bois», a 300 metros de la playa ceutí del Tarajal, los inmigrantes hinchan los botes y se preparan para nadar.
Cae el sol y las chicharras comienzan a apaciguarse. Estamos en «Le petit bois» (El bosquecito), un monte de pinos, eucaliptos, jara y matorral situado a escasos 300 metros de la frontera marroquí con Ceuta, en su bahía sur de la playa del Tarajal. La confluencia del Ramadán, la celebración de la Feria de la Virgen de África —patrona de los ceutíes—, agosto y el relajo de los soldados marroquíes parece ser la constelación perfecta para que esta noche sea la del «gran chapuzón» hacia Ceuta, hacia España: a nado o con barca hinchable de juguete. Cae el sol, sí, y los inmigrantes ilegales comienzan a prepararse en este monte utilizado como base antes de abalanzarse hasta la playa Rifiyyenne: bajadas las veredas del monte, unos escasos 70 metros del mar. Sube la luna creciente y se hace el silencio.

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