domingo, marzo 29, 2015

La red que traficaba con mujeres que traía en cayucos y retenía a sus hijos, a juicio en Vigo

La Fiscalía pide penas de entre 30 y 11 años para los tres procesados -El clan nigeriano las obligaba a prostituirse con vudú -Tres víctimas, testigos protegidos ujué foces vigo 28.03.2015 La red nigeriana que traficaba con mujeres a las que introducía en España en cayucos, muchas embarazadas o madres de bebés que eran retenidos por una pareja para controlar y obligar a las mujeres a prostituirse y pagar una deuda de unos 35.000 euros, será juzgada en la Sección Quinta de la Audiencia con sede en Vigo. Tres de las víctimas son testigos protegidos. La Fiscalía solicita para la pena más alta, 30 años de prisión, para Joy I. , que supuestamente dirigía el negocio junto a un hermano que, afincado en Marruecos, coordinaba la llegada de las mujeres. Le imputa delitos de pertenencia a grupo criminal, inmigración clandestina continuado con ánimo de lucro, tres delitos de trata de seres humanos con fines , dos delitos contra la integridad moral, prostitución en su modalidad de determinación y mantenimiento empleando intimidación y engaño y un delito continuado de falsedad en documento oficial. Su marido, Osaretín U. se enfrenta a penas que suman 23 años de cárcel. Ambos residían en el pueblo de Toledo donde fueron rescatados dos niños de 3 años en noviembre de 2013. El tercer procesado es Isaak Frank O., hermano de Joy, para quien se solicitan 11 años. La denuncia de una de las víctimas en Vigo, forzada a la prostitución en O Berbés y madre de uno de los menores retenidos, permitió a la Policía Nacional desmantelar la rama española de la trama y liberar en Toledo a los dos niños, que permanecían encerrados en habitaciones separadas y eran atados y amordazados. Los menores presentaban graves problemas de nutrición y soportaron vejaciones y humillaciones, así como golpes y quemaduras en una vivienda que los propios agentes describieron como la casa de los horrores. Las mafia, además de retener a los pequeños, exigía a sus madres el pago de 250 euros al mes a para su manutención. Osaretin, con residencia permanente en España, su esposa Joy en situación ilegal, y el hermano de ésta Isaac Frank, residían desde hace años en los alrededores de Madrid y se dedicaban, según la fiscal de Extranjería, en connivencia con Peter O y residente en Marruecos como estudiante, al tráfico ilegal de subsaharianos a los que introducían en territorio Shengen desde Marruecos por la costa española en pateras a cambio de dinero. Incluían en el precio el desplazamiento, traslado, recepción y control desde África a España. En el caso de las mujeres las distribuían, según el escrito de acusación, por diversas zonas del país y de Europa, obligándolas a prostituirse mediante ritos de vudú y amenazas a sus familiares para pagar elevadas deudas. Peter, según el relato fiscal captaba a las mujeres y el matrimonio establecido en España las recogía y distribuía, a la vez que retenían a los bebés nacidos durante el largo viaje desde su Nigeria natal a Marruecos "concebidos pro relaciones consentidas o no" y "asegurándose así su presencia en España al ser más difícil la expulsión de madres con niños". Además, con ayuda de Frank las presionaban con llamadas para que pagaran. Tres de las víctimas relatarán al tribunal vigués sus terribles experiencias como testigos protegidos. Una de ellas fue captada en Nigeria en 2008 y llegó a Rabat (Marruecos) un año después. Llegó en patera a España y un club de Roquetas de Mar fue su primer destino. Nadie le había dicho que su trabajo sería al prostitución. Peter la llamaba constantemente e hizo vudú a su hijo en Nigeria. En 2001 llegó a Vigo y tras cuatro años de esclavitud sexual denunció. Otra de las jóvenes llegó a Toledo con su bebé tras un viaje en patera en 2011. Como no ganaba bastante dinero la enviaron a la ciudad francesa de Poitiers para ejercer al prostitución. Tuvo que dejar a su bebé con Joy y su marido. Fue uno de los niños rescatados por la Policía. La tercera víctima denunció tras la detención de la pareja nigeriana. Era la madre del otro pequeño. Los niños padecían distrofia, no controlaban sus esfínteres y tenían cicatrices http://www.farodevigo.es/sucesos/2015/03/28/red-traficaba-mujeres-traia-cayucos/1210248.html

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