domingo, abril 19, 2015

La yihad se cuela en las pateras

Sábado, 18 de abril de 2015 Félix Rosado MadridPress El drama de la inmigración está superando cualquier consideración moral en el siglo XXI. La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, acaba de afirmar en Madrid que "la persecución religiosa constituye el caso extremo de intolerancia" y es que esa persecución está llegando al enfrentamiento entre inmigrantes, como ha demostrado el triste episodio de la muerte de 12 inmigrantes cristianos arrojados en alta mar. Desde que el mundo es mundo, los humanos no hemos dejado de movernos de un lado para otro en busca de mejores condiciones de vida. Unos vienen y otros van. El siglo XIX dio inicio a migraciones masivas que, por aquel entonces, no conocía de fronteras, más bien, muchos países lo que pedían era precisamente inmigrantes para poder avanzar y progresar. Son famosas las migraciones al Sur de América, a Argentina, por ejemplo, país que incluso lo respaldaba en su Constitución de 1853: El Gobierno federal fomentará la inmigración europea; y no podrá restringir, limitar ni gravar con impuesto alguno la entrada en territorio argentino de los extranjeros que traigan por objeto labrar la tierra, mejorar la industria, e introducir y enseñar las ciencias y las artes (Art.25). También los Estados Unidos de América crecieron gracias a los inmigrantes: la isla Ellis, en Nueva York, fue uno de los símbolos de la llegada de inmigrantes, la puerta al futuro, al sueño americano. Desde 1892 hasta 1954, Ellis Island funcionó como frontera y es célebre por la película El Padrino cuando presenta la llegada del niño italiano Vito, ‘bautizado’ como Corleone –nombre del pueblo italiano del que procedía, a su llegada a América–. Y hablando de cine, si nos ponemos a hacer una lista de actores de Hollywood con pasado inmigrante no paramos: Zsa Zsa Gabor, Cary Grant, Kirk Douglas, Audrey Hepburn, Al Pacino, Arnold Schwarzenegger, Nicole Kidman, Cameron Díaz, Charlize Theron, JLo, ¿podemos poner a Antonio Banderas?, ¿es el actor español inmigrante o no, según qué definición utilicemos de la palabra migrante? Ya Charlie Chaplin interpretó a Charlot en la película “El emigrante” (1917). En realidad todo el continente americano está lleno de inmigrantes procedentes de Europa, principalmente, aunque también de Asia y África, por supuesto. Pero el fenómeno de la inmigración no está presente sólo al otro lado del Atlántico. En Asia, los norcoreanos quieren llegar a China, los chinos a Japón, los surasiáticos quieren entrar en Australia, los indios, en Arabia, los iraquíes, en Turquía, los turcos, en Grecia, los albaneses en Italia, los italianos ya se fueron a Argentina y Estados Unidos, mientras a Italia llegan ahora miles de inmigrantes que huyen de Libia, Siria, países en guerra; los españoles se fueron, regresaron y se vuelven a ir a Alemania y Reino Unido, mientras a España intentan llegar norteafricanos y subsaharianos a toda costa y, así es, quieren llegar a estas costas atravesando el Mediterráneo, valga la redundancia. Los inmigrantes generalmente se han movido por causas económicas, huyendo de guerras de todo tipo y en busca de esa esperanza de una vida mejor. Sin embargo, lo sucedido en el Mediterráneo es algo inaudito: inmigrantes musulmanes han tirado por la borda a inmigrantes cristianos en medio del mar. O sea, inmigrantes que presuntamente huyen del sufrimiento lo que hacen es ahogar a otros inmigrantes sólo por ser cristianos. Sin duda una acción salvaje y ¿terrorista?, o ¿cómo se califica si en vez de ametrallar a judíos en una calle de París, tiran al mar a cristianos, judíos o ateos infieles? Da para reflexionar qué mundo estamos construyendo. Y qué papel juegan los medios de comunicación que se dejan llevar por el sensacionalismo y el amarillismo barato, donde la capacidad de análisis es reduccionista y donde se airea con prontitud y se escandaliza con cualquier violación de los Derechos Humanos, menos cuando los violados son creyentes cristianos. Cualquiera puede arremeter contra los cristianos porque estos no protestan –también habrá excepciones claro–, sino que agachan la cabeza y tienen que aguantar injurias y violencia, también en nuestras sociedad con constantes ataques a su credo, mayoritario en Europa y digno de ser respetado, igual que se pide respeto para las otras religiones. Porque así lo recoge, por ejemplo, la Constitución española. Me llama por eso mucho la atención que se produzcan ataques y odios entre los propios inmigrantes que se suben a una patera, porque entonces ya no estamos hablando de una migración económica, sino de algo más grave que está alentando el terrorismo yihadista. Y esa es otra guerra que Occidente va a tener difícil parar. Las guerras mundiales duraron cuatro, cinco años y llegaba la paz. Pero la guerra religiosa parece haberse reactivado y se impela e incrusta en generaciones de jóvenes con la dictadura propagandística de Al Qaeda y el Estado Islámico. A tal punto que ha llegado incluso a las pateras. ACNUR aboga por una respuesta integral y urgente por parte de la Unión Europea para hacer frente a los desafíos planteados por los miles de refugiados y migrantes que arriesgan sus vidas tratando de llegar a Europa. Esta organización pide una operación europea sólida de búsqueda y rescate, un posible plan humanitario, pero qué plan hay para los inmigrantes que tiran a otros inmigrantes al mar y a qué vienen entonces a Europa. http://madridpress.com/not/187304/la-yihad-se-cuela-en-las-pateras

No hay comentarios: